domingo, septiembre 16, 2007

REQUIEM

Saludos, conocidos, compañeros y amigos en el viaje. Os presento mi nueva composición “Réquiem”.

ESCUCHAR REQUIEM

Bien podría haberse extendido en nombre a (for Santa Claus) o directamente a (for Christmas). Esta pieza formará parte de la recopilación Christmas Sampler de Lost Frontier (www.lostfrontier.org) de este año.

Cómo se hizo (Parte técnica):

Pues veamos hay algunas curiosidades al respecto. La más importante es el tratamiento de las voces. Como siempre colaboró Esther, oye que por algo me casé con ella (es broma, XDDD… o no :S). Antes de empezar a componer, quería que fuera una obra básicamente coral al completo, que el “coro” fuera lo principal. De hecho un réquiem es una obra musical de carácter religioso dedicada a los muertos y a su recuerdo, usualmente de género vocal o mixto. Medí su tesitura vocal al completo… Esther puede moverse por dos octavas completas con comodidad, saliéndose tan solo una nota de ahí ya suena muy forzado (que no es poco), así que compuse todo basándome en el rango musical en el que ella se sentía cómoda. De este modo pues salen voces graves y voces muy agudas, siempre exagerando los matices mediante una ecualización apropiada

He grabado veinte pistas distintas de voz y para la reverb, he utilizado una reverb por convolución para que tuviera un sonido extremadamente natural. Concretamente la Altiverb de Audio Ease. Vease:

http://www.sonidoyaudio.com/sya/vp-tid:8-pid:5-audio_ease_anuncia_altiverb_para_windows_xp.html

Llamadme ignorante pero no conocía de este tipo de reverb hasta hace un par de años a tirar largo y nunca me había dedicado a investigarlo. Ya me sonaban bien las “digitales” y a veces nos cuesta cambiar el chip. Para entender más la diferencia entre las convencionales y las “convolutivas” es bueno leer este artículo que os pongo a continuación sacado de la revista “Future Music”. Aunque mi definición casera sería que las reverbs digitales o “de siempre” suenan a repeticiones y MUY metálicas para según qué y las convolutivas suenan a SALAS DE VERDAD.

La reverb digital ha estado asociada por lo general, al modelado de entornos físicos mediante la ejecución de complejos algoritmos en chips DSP o mediante plugins software. Los fabricantes han pretendido recrear con estos algoritmos los sonidos que escucharíamos en situaciones naturales pero, a excepción de los productos de gama alta, sus intentos no suelen sonar tan convincentes como para que el oído humano sea incapaz de distinguirlos de los sonidos reales.

"La reverb por convolución envuelve técnicas relativamente nuevas para emular salas y espacios acústicos, que se basan en grabar las características de reverberación de un entorno y luego aplicarlas a los sonidos. ¿Por qué relativamente nueva? Pues por que la tecnología que la respalda lleva cierto tiempo disponible (como en los sistemas Otari Radar), pero no ha podido ser implementada en chips DSP y ordenadores personales hasta que éstos han alcanzado velocidades suficientes para ejecutar los intensos cálculos matemáticos involucrados en la "creación" de una reverb de este tipo.

Si nunca has utilizado una reverb por convolución, te estarás preguntando en qué se diferencia de otros tipos de reverb. La diferencia más importante es que suena fantástica.
La primera reverb por convolución en forma de hardware fue la Sony DRE-S777 y apareció en 1999 y costaba más de un millón de las antiguas pesetas. Cuando salió la segunda versión (con software actualizado), su precio había subido en más de un tercio, aunque incluía muchas más RI's (Respuestas a impulsos) y funciones. Yamaha también entraría en el mercado de las reverb por convolución con la SREV1 en el 2002 con un precio que rondaba los 8.500 €."


Sigamos… pues en el resto de orquestación he utilizado otras reverbs ya que precisamente quería que se notase esa diferencia de posicionamiento aún más acentuado.

Al principio salen un par de monjes y unos susurros (secos)… que soy yo mismo haciendo el animal al igual que ya hice en “silent tears” es curioso que lo que es cantar normal… mejor no lo haga en la vida XDDD… y eso que lo intenté en alguna prueba pero es LASTIMOSO, pero lo que son efectos vocales aún los cuelo bastante...

Otra característica técnica o en este caso más de harmonía es que he cambiado el chip compositivo en esta ocasión. Así como muchas veces centro la manera de componer en los sonidos o en crear algo bonito de escuchar, muy melódico, etc… esta vez he querido que lo importante fueran las harmonías. Buscar acordes totalmente distintos a lo que suelo usar, buscar sensaciones TONALES, pensar sin sonidos, sin producción, sólo acordes y melodías solapadas unas encima de otras que produjeran efectos originales. Que en cada frase, nota, armonía se sintiera una sensación cambiante en el cerebro que normalmente ya se avanza a lo que pasará… ¿no os ha pasado nunca que escucháis un tema y ya sabéis lo que vendrá?

Pues he intentado para cada pequeño cambio musical buscar entre las infinitas posibilidades y escoger una que fuera inesperada y a la vez que no quitara el dramatismo musical del tema en según que fragmentos. Que no tenga ni idea de música “académica” no significa que no sepa en mi cabecita y encuentre las mil y una harmonías lo que pasa… es que no sabría que nombre tienen XDDD…

En lo que respeta a la masterización de la mezcla final, no me he pasado nada en la compresión. Yo opino (al igual que lo que hablamos con Héctor Corcín alguna vez), que para las composiciones tipo banda sonora les quita toda la “sensibilidad” debe notarse claramente y con volumen perceptible todos los matices expresivos de intensidad que el autor ha pensado para dar énfasis y humanidad. Otra cosa es en los temas cañeros de mucha percusión, temas techno, rock… en que una buena compresión dan una vida y caña espectaculares. Aun así cuesta encontrar el término medio. Yo trabajo con T-racks y hay un “botón” especialmente que me encanta que es el potenciómetro de “Stereo Env”. Con el cual abres el estéreo final de la grabación hasta que encuentres el idóneo. Puesto que este tema es una coral lo he abierto bastante para que diera la sensación que estás en una butaca y oyes a todo el grupo en toda su extensión.

Qué he querido transmitir (Parte sentimental):

Pues primeramente una mezcla de sensaciones juntas que se dan la mano, además están muy bien definidas y separadas entre ellas. Vamos a desgranar…

0.0 – 0.18 (Intriga, suspense…)
0.18 – 0.38 (Tristeza, melancolía con una pizca de luz, adagio…)
0.38 – 1.52 (Misterio, fantasía, cuentos de bosque…)
1.52 – 2.28 (el Réquiem propiamente dicho es esto… muerte, oscuridad…)
2.28 – 3.05 (Misterio, fantasía, cuentos de bosque…)
3.05 – 3.42 (el Réquiem propiamente dicho es esto… muerte, oscuridad…)
3.42 – 4.18 (el Réquiem propiamente dicho es esto… muerte, oscuridad PERO, esta vez añadimos los metales y eso le da además de lo anterior Solemnidad, grandeza y respeto)
4.18 – al final (Tristeza, melancolía con una pizca de luz, adagio…)

Y es que no a toda la gente les gusta la navidad, para algunos son días de recuerdos desagradables, de tristeza, de alegoría a los muertos, de miedo, de soledad… Cuando ves a todos los niños contentos, las luces en las calles, los villancicos, las risas, los regalos, te rodea una felicidad casi obligada y puede que ese contraste aún arraiga más en tus partes oscuras y las haga salir a flote con más rotundidad.

Espero que os guste.

Un abrazo.